Más del cincuenta por ciento de las viviendas unifamiliares de Galicia carecen de la licencia de primera ocupación

LAVOZDEGALICIA* : Más del cincuenta por ciento de las viviendas unifamiliares de Galicia carecen de la licencia de primera ocupación, también conocida como cédula de habitabilidad. El dato, que no está recogido en ningún documento de ninguna Administración, sí es coincidente en la estimación que formulan arquitectos, consultoras de planeamiento y algunos técnicos municipales. Apuntan, además, que es otra de las consecuencias de la dispersión demográfica de la comunidad gallega.

La licencia de primera ocupación es un requisito indispensable para que una vivienda pueda disponer de los suministros básicos (agua, electricidad y gas). ¿Qué sucede con aquellos edificios que carecen de cédula? Si la casa se ajusta a la licencia de obra y cumple con la normativa urbanística, el permiso se concedería por silencio administrativo. En caso contrario, el alcalde debe iniciar un expediente de reposición de la legalidad. Dicho informe no puede ser incoado transcurridos seis años desde la realización de las obras, plazo fijado para la preinscripción de infracciones urbanísticas graves.

Algunos ayuntamientos han intentado hacer tábula rasa desde los últimos años. Uno de los casos más paradigmáticos es el del Concello de Cambre, donde varias empresas de tasación calculan que el setenta por ciento de las viviendas unifamiliares no disponen de licencia. «El Ayuntamiento ha heredado una situación y ahora no es fácil cambiarla», señala un técnico municipal. «Sabemos que en el bum inmobiliario de los años setenta, cuando prácticamente nació el barrio del Temple, todos los pisos se ocuparon sin esa cédula, ¿qué hacemos ahora?, generaríamos un problema tremendo desalojando las casas», añaden. Así, hace seis años, el Concello de Cambre dio orden a la empresa de aguas que negase la conexión a las casas sin cédula.

Pero los propios ayuntamientos reconocen no disponer de un registro de número de viviendas en esta situación irregular. En A Coruña aseguran que los controles son férreos pero, al mismo tiempo, afloran pleitos entre particulares por ventas de pisos de segunda mano por vicios ocultos que hubieran sido detectados de exigirse la licencia de primera ocupación.

En Vigo son numerosas las sentencias contra urbanizaciones ilegales. En la céntrica calle Rosalía de Castro, donde los edificios disponen de los servicios básicos y pagan impuestos, no se ha certificado la licencia de primera ocupación. Muchas veces los ayuntamientos incurren en curiosas contradicciones: niegan la apertura de un negocio en un local porque aún no ha recepcionado la obra (y por lo tanto, no ha expedido las pertinentes cédulas) pero, al mismo tiempo, coloca un vado en el garaje.

Algunos alcaldes, por el contrario, presumen de aplicar un duro control para paliar esta problemática legal. Es el caso de Antonio Mouriño, regidor de Celanova. «Además de la licencia, antes de dar agua y luz exigimos que estén dados de alta en el catastro», señala. En general, los ayuntamientos utilizan la entrada en vigor de sus PXOM para no dejar pasar ninguna vivienda sin controlar. Pero reconocen que las décadas anteriores pudieron dejar sin licencia de primera ocupación un alto porcentaje de inmuebles.

Que el ayuntamiento no conceda el correspondiente permiso no es obstáculo para que las viviendas recién construidas comiencen a ser ocupadas. De hecho, es muy común que en los primeros meses el suministro inicial sea de la propia obra hasta la emisión de la cédula.





* La Voz de Galicia - 27.09.10
Foto: Vista aérea de parcelas y viviendas unifamiliares construidas al pie del monte Xalo, en el municipio de Culleredo - la voz de galicia

0 comentarios :