"Un empresario en España encarece el precio de la vivienda en más de un 30 %"

DavidCORRAL* : "El pocero de Fuenlabrada, que ha charlado con los lectores de ELPAIS.com, ha puesto en jaque el mercado inmobiliario al ofrecer viviendas cuatro veces más baratas. "El precio de una vivienda son diez millones de pesetas, y con eso ya está bien pagada", de forma rotunda y con lenguaje llano, el 'otro pocero' intenta explicar que su milagro es más mundano que divino. Para José Moreno la clave de la burbuja inmobiliaria comienza con la falta de terreno liberado por las comunidades autónomas y el porcentaje que cobran los empresarios, ya que hasta un 40% del precio de un piso acaba en sus bolsillos. "A mí me resulta abusivo el porcentaje del 3,6% que hemos cobrado, de hecho cuando nos den nuevas promociones lo bajaremos al 2,5%".

Entre pregunta y pregunta a Moreno le suena el teléfono. Los medios de comunicación le acosan. Nada más atender la llamada de otro medio, el móvil vuelve a sonar, esta vez al otro lado de la línea una señora que pregunta: "¿Es usted José Moreno el de los pisos baratos de Fuenlabrada?" Él afirma y acto seguido, la pregunta que se hace toda España: "¿Qué tengo que hacer para conseguir uno de sus pisos?".

Moreno, que atiende con amabilidad y paciencia a la desconocida, pregunta a su interlocutora si es de Fuenlabrada. Al obtener la respuesta negativa, responde un sentido "lo siento. Debe estar empadronada al menos tres años en Fuenlabrada y estar apuntada al Instituto de la Vivienda".

La charla con los internautas se reanuda y el constructor del milagro vuelve a la carga para defender la realidad de sus pisos de tres habitaciones, trastero y piscina por 84.000 euros. "Empecé en esto porque mi Asociación de Vecinos consideraba prioritario el acceso a la vivienda por parte de los jóvenes. Por ello fundamos una cooperativa entre los vecinos. El precio de los terrenos obtenidos fue de 1.050 millones de pesetas". Moreno siempre se maneja en pesetas y recalca que el problema de que justo enfrente de su promoción los pisos cuesten 420.000 euros y los suyos 84.000 es que "el mercado inmobiliario en un 99% es privado", sumando la liberación de terrenos por parte de las comunidades y los beneficios del empresario.

"Mi fórmula se puede aplicar a promociones privadas"

El hecho de que sus promociones estén realizadas sobre terreno público no quita que su idea se pueda exportar al mercado privado. "Alguna vez he pensado en aplicar esta fórmula a promociones privadas. Se podría abaratar el coste de la vivienda por lo menos en un 30%, ese porcentaje se reduce de los beneficios del empresario". De ahí que Moreno ya haya escuchado algunos comentarios en el sector: "Están preocupados, nerviosos, me han comentado que me ande con cuidado".

Pero a Moreno no sólo le han llegado amenazas, también ofertas de otros ayuntamientos interesados en exportar su sistema. "En concreto el ayuntamiento de un pueblo de León, que pone incluso los terrenos gratis, y no tendríamos que pagar impuestos. Además gente de Ciudad Real, de Ávila..." La avalancha de peticiones ha sorprendido a Moreno: "Jamás pensé que además de Fuenlabrada hubiese tanta necesidad real en todos los pueblos".

Este extremeño de 57 años entiende las hipotecas como un receso "a la época de Espartaco, han vuelto las cadenas. Una hipoteca supone encadenar a los jóvenes durante 40 años", asegura, y no duda en citar siempre a su querida Fuenlabrada y los avances que ha alcanzado gracias a la cooperativa que el preside. "En Fuenlabrada se está construyendo hasta un 60% de vivienda pública, creo que ahora que hay elecciones hay que exigir a los candidatos que se comprometan a construir como mínimo un 50% de vivienda protegida. Que se comprometan ante notario y si no lo cumplen, sed su peor pesadilla".
¿Y si alquilamos?

Saúl: ¿Por qué cree que en España nos resistimos tanto a vivir de alquiler y preferimos 'atarnos' como usted dice durante 40 años a una hipoteca cuando por la mitad de dinero podríamos alquilar un piso?
José Moreno: Estamos en lo mismo, hay que diferenciar entre iniciativa privada y pública. Si son las viviendas de Fuenlabrada van a pagar una media de 300 o 400 euros al mes por compra. De alquiler en Fuenlabrada cuesta entre 750 y 1.100 euros. Como consecuencia lo suyo es luchar en el compromiso de los diferentes pueblos, que los concejales y alcaldes se comprometan ante notario por escrito a construir como mínimo el 50 % de vivienda pública. Así tanto en los Ayuntamientos como en las Comunidades Autónomas. En la Comunidad de Madrid es por ley que el mínimo del 50% tiene que ser vivienda pública.




*ELPAIS.com - Madrid - 11/04/2007


1 comentarios :

Anónimo dijo...

Si la vivienda fuera considerada como un bien de primera necesidad y no como un objeto especulativo (como ahora), otro gallo nos cantaría...
Pero aquí se están enriqueciendo cuatro listos, o cuarenta, a costa de todos los demás. Y con la complicidad de los políticos y los banqueros que mandan. ¡¡Ya está bien!!

Os envío este artículo publicado hace poco en Rebelión sobre el atípico constructor de Fuenlabrada:

El constructor de Fuenlabrada, conocido como 'El pelucas', no tiene yate grande ni pequeño y lo más cercano es un todoterreno con no pocos años. También lleva a cabo ambiciosas promociones inmobiliarias pero, a diferencia del 'Pocero' de Seseña, vende sus pisos a precio de coste.

José Moreno, que así se llama este vecino de Fuenlabrada de aire campechano y oronda figura, acaba de entregar una promoción de 402 viviendas en una de las zonas más cotizadas de este municipio, junto al hospital y frente a la universidad, a unos precios absolutamente fuera del mercado. Fuera pero por debajo, ya que sus pisos han costado hasta cinco veces menos que los que los rodean.

Las viviendas, de tres y cuatro dormitorios, incluidos 28 dúplex, han valido a cada joven entre 82.000 y 88.000 euros . "Ni más ni menos que lo que cuestan", explica él. "Y si yo lo hago, ¿por qué no lo pueden hacer los demás?", se cuestiona.

Se trata de una edificación en la que no se ha escatimado en nada. Las calidades son las mejores, cada vivienda cuenta con una plaza de garaje y un trastero y las zonas comunes cuentan con pistas polideportivas, parques y una zona de baño con una piscina de 35 metros de largo.

Los edificios que rodean esta promoción no soportan comparación alguna. Los de tres habitaciones se venden por 405.000 euros, mientras que los unifamiliares sobrepasan holgadamente los 700.000 euros.

Se trata de una urbanización alzada sobre suelo de protección oficial, pero es que tampoco los edificios de esta modalidad aguantan la comparativa. "Yo veo feo que si yo puedo hacerlos por 14 millones, otras cooperativas los hagan por más y que otras empresas los vendan todavía mucho más caros", expone .

Ha habido quien le ha acusado en el pueblo de enriquecerse con estas operaciones, pero lo cierto es que jamás se le ha imputado por nada y que más de 400 jóvenes han cumplido su sueño de tener una vivienda propia. "Yo en todas las cooperativas que he gestionado jamás había cobrado un duro. El constructor me pagaba los gastos de teléfono porque ya me parecía abusivo que me costara dinero a mí", comenta Moreno.
'Me parecía indigno cobrar'

"Me parecía indigno cobrar, pero eso no se lo creía nadie nada más que mi familia, que encima me llamaba gilipollas", continúa. "Muchos decían que me estaba haciendo millonario así que se decidió que en esta promoción tuviera un sueldo".

Como consecuencia, dejó durante el tiempo que han durado las obras la dedicación exclusiva como encargado de la pocería de Fuenlabrada. "Los últimos tres meses casi dormía en la obra para poder entregarlos a tiempo", recuerda.

Aunque regularmente es tentado por los distintos grupos políticos de Fuenlabrada, este revolucionario del ladrillo (curiosamente, su edificio se ubica en la calle Che Guevara) no tiene ninguna aspiración política. "Mi vida está dedicada a esto", dice él.

Sí que participó en los comicios de 1979 dentro de un partido minoritario (PT, Partido de los Trabajadores) con el que salió elegido, ejerciendo durante cuatro años como Concejal de Deportes. Sin embargo, entendió que podía aportar más trabajando a pie de calle y se implicó a fondo en el movimiento obrero y asociativo.

Su maniobra más conocida en este ámbito sucedió cuando desahuciaron a 12 familias de su barrio, La Avanzada. "Los había estafado un abogado", repasa. Convocó a los vecinos y consiguió reunir a 2.000 personas, la mayoría mujeres y niños, ya que era por la mañana de un día laborable. Su imagen esposado a una ventana es ya parte de la historia de esta localidad.

Poco después abanderó la primera cooperativa en un aparcamiento subterráneo al entender que sería más productivo unirse al sistema y cambiarlo desde dentro. Que la mejor prevención para este tipo de dramas sería sortear la plusvalía de los promotores consiguiendo que los propios ciudadanos promovieran sus casas.

A esta primera siguió otra en unos bloques que llevaban años abandonados. Esta segunda se desarrolló hace nueve años y las viviendas se entregaron a un precio de seis millones de las antiguas pesetas. Dos años más tarde, desarrolló otra promoción de 170 viviendas que oscilaron entre los ocho y los nueve millones de pesetas.

No contento con esta situación, ya está pensando en su nueva aventura: exportar el modelo a las localidades colindantes. Los jóvenes de Humanes y Moraleja de Enmedio ya se frotan las manos ante la posibilidad de que esta ONG del ladrillo empiece a trabajar en sus pueblos.