Se multiplican las sentencias urbanísticas en A Coruña

ELCORREOGALLEGO* : En los últimos meses sentencias de las más altas instancias judiciales están dando la razón a los que en el final del pasado siglo criticaban el caos urbanístico de A Coruña, producto de planes urbanísticos permisivos con la construcción. Casos renombrados como el del edificio Conde de Fenosa -pasó de oficinas a viviendas y aumentó en exceso su volumen-, el de Someso -de un campo de fútbol a un centro comercial- o el Parque Ofimático -de oficinas a un barrio residencial-, son actualidad, pero hay más que se van quedando en el olvido, pero que siguen latente. Y si vamos más atrás, nos encontramos con la paradoja que un edificio del barrio de Os Castros sigue en pie tras la primera sentencia firme que se dictó en 1979 por invadir el patio de luces del contiguo.

El perfecto diseño del ensanche de Barcelona de finales del siglo XIX fue el origen del urbanismo moderno en España. Muchas ciudades lo copiaron, pero no por ser un ejemplo, sino que se les obligó por ley a las capitales de provincia y ciudades de más de 20.000 habitantes a seguir las mismas pautas. Entre ellas A Coruña, lo hizo en 1.895 fuera de las murallas exteriores, donde hoy está la calle Juana de Vega, y las manzanas se edificaron en rectángulos o trapecios adaptadas al terreno.

Lo cuenta Xosé Lois Martínez Suárez, doctor en arquitectura, y profesor titular del departamento de Proyectos Arquitectónicos y Urbanismo de la Escuela Superior de Arquitectura de la Universidade da Coruña, de la que es además en la actualidad el vicerrector de Infraestructuras.

En su repaso a los planes urbanísticos de municipio de A Coruña, apunta que "otra gran experiencia del ensanche", además del que en forma de uve parte de Juana de Vega hacia la plaza de Vigo y hacia la plaza del Maestro Mateo, "fue la de la Ciudad Jardín, una auténtica barriada con un centenar de parcelas que se construyó en la década de 1920 por una sociedad de cooperativistas".

Tras la paralización de las iniciativas en la siguiente década, se retomaría la actividad con un plan fallido en 1945, sustituido por otro en 1948 -el primero que abarcó todo el municipio- que definió el desarrollo de la expansión de la urbe, aunque años después el Ministerio de la Vivienda, que tenía rango superior al Ayuntamiento, fue por libre y así creó el barrio de las Flores y el polígono de Elviña en sus dos fases.

"Con el de 1968 comienzan los problemas al conceder mayor altura en las construcciones", dice Martínez Suárez. En 1980 se intentó corregir ello, pero la llegada del PSdeG al poder municipal propició dos planes, en 1985 y 1998, que permitieron excesos que es muy posible que el Ayuntamiento tenga que pagarlos ahora, con indemnizaciones millonarias o, en otros casos compensando a los afectados con terrenos que tengan edificabilidad.

Otra opinión recabada es la de Mario López Rico, arquitecto y concejal de Rehabilitación del Ayuntamiento herculino, quien piensa que "es un poco excesivo hablar de caos", porque considera que A Coruña "sufrió como casi todas las ciudades una fuerte presión inmobiliaria especuladora en los años 60 e 70", producto del "desarrollismo franquista", y aporta una visión muy particular: "A Coruña además cuenta con una peculiar topografía y configuración en fondo de saco, que es un atractivo y al mismo tiempo una gran dificultad para la planificación en comparación con las otras grandes ciudades gallegas".

López Rico lamenta que el primer gobierno democrático del alcalde Domingos Merino encargó un PXOM para corregir los excesos anteriores pero "pasó lo que pasó, y lo primero que hizo Paco Vázquez fue meter en un cajón un magnífico proyecto del arquitecto Xosé González-Cebrián, y aprobar el de 1985 que primaba el incremento de densidad sin prever mecanismos para gestionar la obtención de dotaciones y espacios públicos".

Por eso, coincide con el profesor Martínez Suárez en que el Plan Busquets humanice la ciudad. No obstante advierte: "Esperemos que no sufra una amputación o una transformación indesable". "Hay cosas que no veo bien, algunos convenios urbanísticos que se deben retirar o revisar, pero globalmente este plan es un gran avance", precisa.

Densidad excesiva

El PXOM coruñés vigente desde 1998 hizo que la urbe herculina volviera a los excesos del desarrollismo de los años sesenta. Colapsó el centro y provocó una densidad excesiva al permitirse alturas que duplican el ancho de la calle. Prácticamente 300 viviendas, que suponen unos 1.000 habitantes, por hectárea, y todo ello sobre una estructura del siglo XIX. "Es un documento dramático", manifiesta Xosé Lois Martínez, quien recuerda que por este plan se descatalogaron edificios como el Matadero, el Asilo de Ancianos, o el que fuera la sede de Fenosa -el hoy llamado Conde de Fenosa, que una sentencia en firme del Tribunal Supremo obliga a demoler- y se provocaron disparates en barrios de pocas alturas como Atochas Monte Alto con calles estrechas que provocan congestión. "Por eso, con el comienzo del siglo, las personas jóvenes comenzaron a irse a los ayuntamientos de la periferia en busca de una forma de vivir más humanizada", indica el profesor.



* El Correo Gallego - 24.01.11
Foto: FALTA DE ARMONÍA Hay zonas de A Coruña, construidas a partir de los años sesenta, en las que parece que los edificios cayeron del cielo sin ningún tipo de orden - elcorreogallego

1 comentarios :

KYNETIC dijo...

Cuando las administraciones no cumplen con la letra de la ley. Cuando Alcaldes se posicionan como directores de empresas publicas, o algun otro cargo, como Director "honorario", etc. Cuando estas mismas empresas disponen de capital privado, contrario a la Ley de empresas, en cualquier democracia occidental.
Cuando sustituyen al Ex-gerente de una empresa publica como Emuvissa en Santiago, por practicas muy cuestionables. Por que le conceden al mismo un cargo en urbanismo en A Coruna? Quizas porque el incumplimiento de la Ley es ...............una cuestion de "todos los animales son iguales, pero algunos animales, son mas iguales que otros."


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