Valencia.-El Bigotes compró 630 pulseras entre los regalos a políticos del PP pagados en efectivo

LEVANTE* : La policía judicial confirma en la contabilidad de las tiendas de lujo que la trama Gürtel agasajó a la plana mayor del Consell y el partido, sus clientes vip, y no sólo en Navidad. Los listados hallados por la policía en los registros de las sedes de Orange Market con una relación de regalos a dos docenas de políticos, familiares, y personalidades que tenían voz y voto para darle contratos no eran una mera declaración de intenciones. Los obsequios se hicieron. «Reflejan datos reales». Lo ha constatado la Brigada de Blanqueo de Capitales de la UDEF en un nuevo informe en el que, a lo largo de 189 páginas, repasa la contabilidad de las tiendas en las que se adquirieron los presentes: Loewe, Luis Vouitton y la joyería Hermanos Iborra. Álvaro Pérez, «El Bigotes», presidente de Orange Market siempre hizo gala de su condición de detallista por partida triple.

Regalaba a todo aquel que tuviera mano para generar negocio para su empresa y el precio del regalo era directamente proporcional a la entidad del obsequiado. Al contrario que los Reyes Magos, repartía obsequios durante todo el año y, en tercer lugar, seguía la tradicional costumbre de dar la ganancia al vecino antes que a un extraño. A la joyería Hermanos Iborra, por ejemplo, El Bigotes le compró nada menos que 630 pulseras, 252 de las cuales eran de plata y el resto, adquiridas en distintas remesas, de las llamadas «náuticas».
Sea por el furor de la Copa del América o porque la joya le enamoró, el caso es que compró entre diciembre de 2006 y julio de 2007 todas estas piezas, que le costaron 12.410 euros. Además de las pulseras, también adquirió un reloj con barómetro por 1.160 euros. La Brigada de Blanqueo subraya que en todas las facturas de las pulseras se hacía constar que están «grabadas con el logotipo de la empresa». «Era una práctica habitual empleada por la organización de Francisco Correa cuando se trataba de camuflar las compras de carácter particular efectuadas por los dirigentes y empresas de la organización con destino a regalos para personalidades y/o distintos cargos públicos afines a sus intereses». explica la UDEF en su dictamen.
La policía no pasa por alto que el número de unidades compradas, que figuran en las distintas facturas, «no constituyen una cifra redonda, sino que se compran cantidades como 112, 38, 84», lo que abunda en sus sospechas de que no eran para regalos de empresa, ya que si «se tratara de regalos de carácter promocional (..) parece más lógico efectuar la compra de un número de unidades redondo».
La inmensa mayoría de las compras de regalos se hacían en efectivo, puede que por el elevado volumen de dinero negro, registrado en la contabilidad B hallada en los pisos de la trama. El Bigotes y Pablo Crespo, mano derecha de Correa, estaban abonados al metálico en las tiendas Loewe, Louis Vouitton o la citada joyería valenciana. La encargada de Easy Concept, Felisa Jordán, era casi la única que usaba la VISA. La trama no descuidaba quedar bien con nadie de los que influían en su negocio, pero no todos eran iguales ante la ley de El Bigotes, según la lista encontrada en la sede de Orange Market aquel 6 de febrero de 2009 en la operación que desplegó Garzón, que en su día ya publicó este diario y ahora cotejada por la policía en la contabilidad de los establecimientos.

En la joyería de la jet set
A la entonces consellera de Turismo, Milagrosa Martínez, se le obsequió, según la policía, con un Hublot de 2.400 euros, comprado en Joyería Suárez (la de mayor de solera de Madrid, ubicada en la calle Serrano), en la Navidad de 2005, cuando el segundo contrato de Fitur —Orange Market se llevó cinco por 5,32 millones de euros— estaba recién pescado. A la mujer del presidente Camps, El Bigotes le regaló un bolso de 750 euros. Un complemento de Loewe que se pagó con una factura a nombre de Orange Market por importe de 2.880 euros, que incluía otros objetos. Al hijo del presidente Camps le regaló el robot Aibo y una maleta, que la policía valora en 1.809,48 euros y 249,34 euros, respectivamente. El 15 de diciembre de 2005, Orange market hizo una transferencia a Sony-E-Solutions Europe para abonar esas compras.
El ex secretario general del PP, Ricardo Costa, no fue descuidado por el comercial de lujo de la red de Correa en la Comunitat Valenciana. El hombre que les adjudicaba las campañas y los actos del PP recibió como detalle navideño una maleta de Loewe de 1.130 euros. En un informe anterior, la UDEF apuntó que Orange Market pagó una moto de 15.000 euros, cuyo «uso y disfrute particular y privado, al menos temporal» correspondía a Ricardo Costa.

Todo el año era especial
En la lista de 24 agraciados con presentes en aquellas Pascuas, aparece también Antonio Corbí, al que le correspondió un libro de 200 euros comprado en un anticuario. Corbí era entonces, además de secretario del arzobispo Agustín García-Gasco, el delegado arzobispal en la Fundación V Encuentro de las Familias, que gestionó la organización de la visita del Papa. En aquel evento la trama Gürtel logró, como mínimo y según la investigación judicial, una maleta con 957.000 euros que Pablo Crespo recogió en Sevilla como comisión por haber logrado el contrato de 7,5 millones de euros para Teconsa.
Los regalos a políticos, familiares y personalidades no se ceñían a la Navidad. La policía advierte que no se observa «una concentración especialmente significativa de las compras efectuadas durante el periodo navideño que pudiera indicar que dichas compras tuvieran como destino efectuar regalos en dicha época». Entre enero de 2003 y diciembre de 2008 hay compras de regalos en las citadas tiendas de lujo.

De «shopping» por Loewe y Louis Vuitton en Valencia, Madrid, Palma y Marbella
Donde había una ramificación de la red de empresas de Francisco Correa, allí había un cliente para las tiendas de lujo. Los cuadros de facturación aportados por Loewe y Louis Vuitton revelan que El Bigotes, Pablo Crespo, Felisa Jordán o Mari Carmen Rodríguez Quijano —esposa de Correa— hicieron no menos de setenta y una visitas productivas —para invertir, más que para gastar— a estos establecimientos en Madrid, Valencia, Palma de Mallorca (donde reside Pau Collado, ex responsable de Easy Concept) y Marbella. En este último destino compró diversas prendas la mujer del número uno de la trama. En la tienda Louis Vuitton de Valencia adquirió artículos Pablo Crespo desde enero de 2003, cuando ni siquiera había nacido Orange Market. Álvaro Pérez acabó convirtiéndose en cliente vip de esta tienda y de la de Loewe, según la policía.
Hasta diciembre de 2008 hay numerosas adquisiciones registradas en la contabilidad de estas tiendas de artículos de lujo.




* Levante - 13.11.10
Foto: Álvaro Pérez 'El Bigotes' - publico