El paisaje planta cara a la economía

LAVOZDELANZAROTE* : La Fundación César Manrique prepara el documento con las conclusiones del encuentro del pasado viernes entre prestigiosos paisajistas europeos. Ha llegado el momento de poner al “paisaje” en el lugar que le corresponde, aunque para ello haya que enfrentarse a los modelos económicos que actualmente están “destruyendo” el entorno natural.

La entrada en vigor en España del Convenio Europeo del Paisaje, el pasado sábado 1 de marzo, como instrumento de protección, gestión y ordenación de todos los paisajes de Europa, abre una oportunidad que la Fundación César Manrique ha querido aprovechar implicando a los más prestigiosos paisajistas que se reunieron en Lanzarote para avivar el debate y plasmar por escrito sus planteamientos con el fin de influir en las políticas europeas. Se trata de aplicar “la lógica del paisaje al capital desbocado”.

Economía depredadora

El Convenio que ha entrado en vigor se percata de que “la producción agrícola, forestal, industrial y minera, así como en materia de ordenación del territorio y urbanística, trasporte, infraestructura, turismo y ocio y, a nivel más general, los cambios en la economía mundial están acelerando en muchos casos la transformación del paisaje”. Pero paisajes que, como ocurre en España, están siendo resultado de “intervenciones muy dispersas”, sin que nadie previamente planifique a gran escala su impacto en el medio natural.

Por eso, no es de extrañar que los paisajistas incidieran durante las más de tres horas de debate en la necesidad de dar un paso al frente de la economía. Porque confían en que “cuando uno respeta la lógica del paisaje desarrolla ciudades y entornos rurales más durables, eficaces económicamente y con mayor calidad de vida”, según expuso la moderadora, Lisa Diedrich.

Un ejemplo se puso sobre la mesa. La Lusacia alemana, donde décadas de actividad minera han convertido 500.000 hectáreas en un “fantasmal retazo de la luna”. Pero los paisajistas creen que “en el horror puede germinar la belleza”. Rolf Kuhn, profesor de la Internationale Bauausstellung, que dirige el mayor proyecto de regeneración paisajística de Europa, apuesta por “sanear, reforestar, convertir los cráteres en lagos y devolver la vitalidad a un espacio muerto”. Pero para ello es necesario que economía y paisaje se den la mano, y se comience por “decir no” con vehemencia a las iniciativas claramente insostenibles, como manifestó el profesor del Instituto de Arquitectura de la Universidad de Ginebra, Georges Descombes.

El paisaje democratiza

Los “malos paisajes” derivan en “malos ciudadanos” y por tanto en “malas democracias”. Así, al menos, lo entiende el director de la FCM, Fernando Gómez Aguilera y los especialistas que participaron en el encuentro. “No sólo hay que considerar los aspectos técnicos, sino los culturales. Una buena democracia se puede basar en un buen paisaje”, sostuvo Lisa Diedrich, que convino en subrayar que “cuando uno empieza a cuidar el paisaje urbano o rural en el que vive puede influir en la sociedad”. Se habló, también de educación y de la importancia de involucrar a la población en construir el entorno donde pueden llegar a ser felices.

Ahora, las conclusiones de todas estas ideas se imprimirán en el “Documento Lanzarote del Paisaje” que está en fase de redacción y será presentado en la Bienal del Paisaje Europeo en Barcelona el próximo mes de septiembre, además de mostrarlo a la Comisión Europea con el objeto de influir en las intervenciones urbanísticas de todo el paisaje europeo. Una apuesta firme por el paisaje que ha comenzado enfrentándose a la economía, pero que deberá buscar vías para entenderse con ella.

PALABRA DE PAISAJISTA

“El problema es la desconexión entre la economía y las necesidades humanas, algo que los paisajistas deben resolver, pero tienen que hacerlo a contracorriente de la economía actual”. LORETTE COEN, moderadora de la sesión

“Si planificamos bien podemos desarrollar economía y paisaje creando nuevos valores al respecto, porque sólo podemos hacer feliz a la gente si se sienten cómodos donde viven”, ROLF KUHN, profesor de la Interna-tionale Bauausstellung

“Hay que apostar por una economía basada en la protección de la diversidad”. GILLES CLÉMENT, autodenominado “jardinero planetario”

“Hay que buscar una manera de transportar estos valores al nivel político europeo, pero la conclusión es que es muy complicado estar al frente de la economía. Pero no se puede aceptar todo. Hay que enfrentarse a ella y proponer modelos alternativos”. LISA DIETRICH, especialista en arquitectura del paisaje





* La Voz de Lanzarote - Laura Fernández Palomo - 7 de marzo de 2008
Foto: Lanzarote, Timanfaya - wikipedia.org