«¿Este hombre tiene que estar en prisión!»

SUR/Marbella* : Recién se posicionaba en la manifestación, espetaba Antonio Casares, de Las Albarizas, al encuentro con el informador: «Si no lo hace la justicia, seremos los vecinos de Marbella con este tipo de actos quienes evitemos que este hombre (refiriéndose a Juan Antonio Roca) viva tranquilamente aquí, como si nada, después de todo lo que ha pasado». Esta opinión contra la excarcelación del ex asesor urbanístico del Ayuntamiento fue unánime.

«Claro que sí, y si la fuerza no es suficiente para presionar, pues tendremos que unirnos a la demanda gente de fuera, como yo, que vengo de Ojén; ¿Roca tiene que estar en la cárcel!», refería Olga Santos, una mujer de mediana edad que todavía ayer, tres días después de la salida de la cárcel de Roca, no había resuelto su indignación: «Es una situación increíble; todavía no me creo que este personaje descanse plácidamente en la calle».

Eso, indignación, era el sentimiento común que experimentaban los vecinos que se acercaron al punto neurálgico de la manifestación para airearla sin miramientos. Entendían que allí, justo en ese momento y a esa hora, en el mismo corazón de una ciudad «que todavía se duele del daño que le hicieron entre unos y otros, con un expolio protagonizado principalmente por Roca», definía Francisco Pérez, de la zona de Francisco Norte, debían elevar «juicios altos y claros, directos».

No todos respondieron de esta manera «porque persiste el miedo», admitía Francisco, pero la mayoría sí que emitió su veredicto: Emilio, Ramón o Silvia, entre muchos otros. Declaraciones casi idénticas, hasta en la entonación: «Si la justicia no encarcela a Roca, nosotros presionaremos para que lo haga».

«Mala de los nervios»

Rabia también, impotencia «por el desfalco que sufrió la ciudad», censuraba Pilar Llanos. «Es que es pensar que este hombre, por llamarlo de algún modo, sí, Roca, se llevó ese dinero que yo y el resto de vecinos pagamos a través de los impuestos y ponerme mala de los nervios; por eso estoy aquí, con mi marido y mis hijos, para denunciar su puesta en libertad y transmitir al juez, a quien sea, que debe regresar a la cárcel», opinaba mientras alentaba a su esposo a pronunciarse.

Una indignación que alcanza también los municipios limítrofes como Fuengirola. Desde allí se desplazó Juan Antonio Palacios para unirse al pueblo de Marbella. «Voy a ser muy claro: Roca no puede estar en la calle ni un minuto más; es una pena como dejaron la ciudad, muerta, destruida. Creo además que un episodio como el que vivió Marbella debe unir a toda la provincia», recomendaba. «¿Todos contra la libertad de Roca, sin descanso!», se esforzaba en exclamar con la intención de hacer cómplices del sobresalto al resto de compañeros, como Susana Ruiz, una universitaria que no dudó un segundo en abandonar Málaga capital para quejarse: «Y eso que soy estudiante de Derecho, pero es que la libertad de Roca es indignante».





* SUR - JOSÉ ANTONIO GARCÍA - 18.04.2008
Foto: Protesta. Los manifestantes portaron pancartas en las que reclamaban justicia tras la puesta en libertad de Roca/ J-LANZA, diariosur.es



NOTICIA RELACIONADA: Más de 1.500 vecinos muestran en la calle su indignación por la excarcelación de Roca - SUR - 18.04.2008

1 comentarios :

Anónimo dijo...

Mucho morro tienen en Marbella. Esas protestas vecinales tenían que haberlas hecho hace diez años o más, cuando estaban Roca, Gil y toda su corte de golfos urbanísticos. Ahora ya es tarde y sus lamentos poco creíbles ya que apoyaron los pelotazos con sus votos y su silencio.
La misma complicidad con los delincuentes, públicos y privados, está ocurriendo en otras zonas, como Murcia, Castellón o Canarias.
Ahí siguen los capos mafiosos haciendo de las suyas.