Benalmádena, un municipio hormigonado a la sombra de Enrique Bolín

ELOBSERVADOR/Málaga* : El paseo marítimo por la ‘Costa del Solar’ se detiene hoy en Benalmádena, el cuarto municipio con mayor ocupación urbana -el 69,3%- en su primer kilómetro de litoral, señalado como otro de los “puntos negros” del litoral malagueño por Ecologistas en Acción o Greenpeace. Un municipio cuyo espectacular ímpetu urbanístico no se explica si no es por el hombre que ha manejado las riendas del consistorio desde que en 1966 accediera por primera vez a la alcaldía, Enrique Bolín, cuya herencia, tras perder estos últimos comicios, es un municipio con sus posibilidades de crecimiento agotadas y la mitad de suelo sellado por el asfalto.

Vertidos, contaminación, problemas de tráfico y una depuradora en pruebas hacen el resto.

UNA noticia define bien el estilo de Enrique Bolín en la que ha sido durante muchos años su particular parcela de poder en la Costa del Sol. Cuando el ‘caso Malaya’ estaba en su apogeo y la corrupción en Marbella ocupaba grandes titulares de los medios nacionales, el ex alcalde de Benalmádena homenajeó a dos de sus principales imputados, los constructores Rafael Gómez ‘Sandokan’ y Cristóbal Peñarroya. En su discurso de agradecimiento a estos dos promotores Bolín argumentó que ambos “habían contribuido al desarrollo de la ciudad” y que al fin y al cabo, “todos estamos imputados por algo”.

LA de Bolín es una biografía política digna de estudio. Descendiente de una poderosa familia hotelera malagueña, alcalde franquista con tan solo 26 años, adscrito al Partido Popular del que fue expulsado tras un incidente en Gibraltar -le pillaron con cocaína, vídeos porno y unos menores en su yate- formó su propio partido independiente y ha salido indemne de mil batallas y luchas políticas logrando varias mayorías absolutas en Benalmádena. Hasta el punto que el PP le quería en sus filas de nuevo para estas últimas elecciones municipales.

PESE a que ha sido denunciado en varias ocasiones y acusado de corrupción, tráfico de influencias, cobro de comisiones e enriquecimiento ilícito, a “La Reina” -como le denominan sus enemigos- nunca le ha condenado un tribunal por sus gestiones urbanísticas. Más al contrario, le han proporcionado una bolsa de votantes incondicionales que le han aupado a la alcaldía de Benalmádena en repetidas ocasiones.

ENTRE sus ‘logros’, Puerto Marina, unas instalaciones que impulsó en los años setenta y que hoy se han convertido en uno de los “puntos negros permanentes” para Ecologistas en Acción con la playa de Malapesquera como “principal receptora de todos los vertidos tóxicos, derrames de carburantes, restos de pinturas, disolventes, aguas fecales de las embarcaciones e instalaciones portuarias”. La organización conservacionista recuerda que “el antiguo puerto ya construido en sus defensas exteriores fue rellenado y ampliado, sepultando toda la increíble fauna que albergaba, se convirtió en la zona en la que actualmente están los aparcamientos, restaurantes, centros comerciales y pueblo marinero. El dique de levante se retranqueó 400 metros mar adentro dando lugar al puerto que conocemos actualmente”. Puerto Marina es también un centro de diversión nocturna en el que se ha producido una de las primeras sentencias condenatorias por contaminación acústica contra un ayuntamiento, al que obligan al pago de una indemnización de 15.000 euros.

ECOLOGISTAS en Acción también ha otorgado banderas negras en Benalmádena a la playa de Santa Ana, donde “desembocan dos arroyos olvidados que arrastran aguas tanto pluviales como fecales y domésticas sin tratar, de algunos establecimientos hosteleros de la zona” y a los “acantilados de Torremuelle por la gran presión urbanística de la zona que ha triplicado el número de viviendas que hacen sus vertidos directamente al medio marino, sin emisarios, y desde unas supuestas depuradoras privadas”.

TAMBIÉN para Greenpeace el litoral de Benalmádena “está prácticamente destruido por la voraz presión litoral_benalmadenaurbanística” y aún más, la organización señala que aumenta el peligro por una posible “ampliación del Puerto Deportivo en 1.200 puntos de atraque”. Unas obras que han quedado en entredicho tras el último informe sobre la situación del litoral andaluz realizado por la Delegación de Costas del Ministerio de Medio Ambiente que entiende que la ampliación del puerto es una amenaza y califica la zona de levante de dicha marina entre las de riesgo de inundación. En dicho estudio, Medio Ambiente también propone demoler la residencia de Unicaja, en Arroyo de la Miel, por su ubicación tan cercana al mar sin respetar la zona de servidumbre.

CON casi 46.000 habitantes censados y una población que aumenta más del doble en verano el nuevo alcalde de la ciudad, el socialista Javier Carnero, ha reconocido que Benalmádena “ya no puede crecer más”. Las imágenes que acompañan esta información tomadas por el fotógrafo y miembro de Ecologistas en Acción José R. Moreno Tamayo son bastante explícitas. Benalmádena sufre problemas de tráfico propios de una gran ciudad derivados de la ausencia de planificación urbanística. La mitad de sus 34 kilómetros cuadrados de suelo están sellados con asfalto y hormigón. Su depuradora todavía está en periodo de pruebas y Bolín se encuentra desaparecido de la escena pública. Algunas fuentes lo sitúan ahora como asesor de la promotora Cogilco con cuyos responsables ha estado viajando a los países del este en busca de nuevas oportunidades de negocio, si bien este extremo no ha podido ser confirmado.






* Revista El Observador - 13/11/07
Foto: Benalmádena (Málaga) costa - El Observador



5 comentarios :

pepe dijo...

Resulta lamentable que Enrique Bolin, siendo inmensamente rico, no tenga propiedades a su nombre para no tener que pagar a Hacienda y Seguridad Social. Y todavía habrá quien quiera votarle...... ¡Que asco!

Anónimo dijo...

Tengo que desmentir mi comentario desafortunado del otro dia sobre D. Enrique Bolin. Confundí su nombre con el de otra persona en una conversación. D. Enrique habrá gobernado mejor o peor, pero desde luego no es un defraudador.

Anónimo dijo...

El señor Bolín, a fecha 2010 ya si ha sido condenado a 8 años de inhabilitación profesional.

Anónimo dijo...

Vivo en Benalmádena desde hace 10 años. Actualmente no es ni sombra de lo que era. Enrique Bolín convirtió Benalmádena en la Perla de la Costa del Sol. A mi modo de ver es un excelente gestor con un profundo amor hacía su ciudad. EL gobierno que tiene ahora Benalmádena NO HACE NADA. La ciudad está sucia, los comerciantes abatidos,...
¡Ojalá pudieramos volver a tener a Bolín como alcalde!

Anónimo dijo...

¡Cuánta desinformación o cuánta hipocresía!
Llegué a Benalmadena a principios del 87.
A partir de allí, sólo fue ir conociendo, por simple vecindad y desde demasiado cerca, un transfondo de corrupciones a cual más aberrante y de muy distinto origen. . . TOLERADO, silenciado y aprovechado por TODOS.

El día que se "descubrió" mi distancia e inocencia en cualquiera de estos juegos infames . . . casi me cuesta la vida.

Detrás de la "bandera de enganche" o diana predilecta llamada Bolin, se esconden todo tipo de corrupciones de muchísimo más vuelo y gravedad (seguramente, muchas de las cuales, él mismo no tenga noticia -lo que no le hace inocente de otras, por supuesto-).