Mosquera ofreció más fincas al gancho del caso Gondomar

ATLÁNTICO/Pontevedra* : José Luis Mosquera, ex concejal de Gondomar condenado por solicitar sobornos a promotores, llegó a proponer más negocios al gancho de la Guardia Civil en el mismo momento en el que recibía dinero por el desarrollo urbanístico de A Pousa.‘Tengo más fincas para comprar en Gondomar, si quieres hablamos la semana que viene’, dijo el ex edil, según aseguró ayer el hombre que destapó la trama. Era el 14 de febrero de 2007 y las extorsiones de los concejales salían a la luz pública tras una ardua labor de seguimiento, escuchas y esperas que acababan con las detenciones del propio Mosquera, su compañero Alejandro Gómez y el arquitecto Borja Ramilo.

Manuel Ángel Rodríguez González, ex miembro del grupo municipal de Esquerda Galega en el Concello de Vigo, fue el cebo que utilizaron los investigadores y, una vez superado el proceso, se siente satisfecho por el resultado del juicio celebrado en la Audiencia de Vigo. ‘Las expectativas se cumplieron, estamos contentos’, asegura admitiendo que el pacto entre la Fiscalía y dos de los acusados fue forzado por estos últimos. ‘Yo lo que tenía eran ganas de coger al que fuera después de lo que pasó en Vigo –supuestas corruptelas nunca probadas–, me daba igual quien cayera’, explica. Manuel Rodríguez señala que ‘no tiene justificación decir que yo lo hice por cuestiones políticas’ y añade que ‘me encantaría cazar al mayor número de corruptos, sean del partido que sean’. Desde su punto de vista, no valió la pena económicamente, puesto que sus amigos perdieron parte del dinero que pagaron por la finca. ‘No saqué nada, sólo sirvió para devolverles el favor y que ahora me tengan admiración’, matiza. Tiene ‘la intución’ de que la costumbre por parte de los dos concejales era cobrar porque ‘funcionaban como un piñón, eran parte del engranaje’ y señala que Gómez ‘no era Santa Teresa de Jesús’. Salva el denunciante al equipo redactor del Plan General, del que tiene ‘constancia’ de que no estaban implicados, pero también cree que la corruptela estaba generalizada en la comarca. ‘El resto del Val Miñor estaba igual’, asegura. No es partidario, sin embargo, de imponer penas de prisión por este tipo de delitos, puesto que considera que ‘no es un problema de cárcel, es de prescripción de las penas, el objetivo sería evitar que choricen durante diez años o más’.






* Atlántico - 9.06.10
Foto: Gondomar (Pontevedra), vista - revistafusion.com

0 comentarios :