QUÉ/Madrid* : Las máquinas llegaron ayer al número 128 del Sector 4 en la Cañada Real sobre las 9 de la mañana. Según los vecinos, tenían permiso para entrar y derribar ese inmueble, pero no el 130 y el 132 como pretendían. Por eso, una veintena de ellos se 'atrincheraron' durante tres horas en el número 130 (la vivienda del dueño del inmueble derribado) para que no la derribasen.
No lo hicieron, pero allí se vivieron momentos de tensión que hasta provocaron la detención de un vecino por exhibir un arma de fuego. Además de este derribo hubo uno más en el Sector 3, a la altura de la parcela número 20.
En concreto, se trataba de una nave industrial, de 325 metros de superficie, así como un cerramiento de parcela de 1.020 metros cuadrados, estaban localizados en el número 128, y un segundo cerramiento, de 417 metros cuadrados. Numerosas patrullas de Policía Municipal y Nacional custodiaron los derribos.
"Las demoliciones efectuadas esta mañana se enmarcan en el conjunto de medidas que viene desarrollando el Ayuntamiento de Madrid para el mantenimiento de la legalidad urbanística, hasta que se aborde una solución integral que permita afrontar la compleja situación de la Cañada Real Galiana", explicaron desde el Consistorio.
Según sus datos, desde mayo de 2007 el Ayuntamiento de Madrid ha efectuado en la Cañada y su entorno un total de 201 demoliciones de diverso tipo.
"¿DÓNDE VOY CON 59 AÑOS QUE TENGO?"
Alejandro, dueño del inmueble derribado, atendió a la prensa con lágrimas en los ojos. En sus manos, numerosos recibos del IBI con los que quiso demostrar que era 'legal'. Su casa-taller, que es su trabajo y su única posesión, también la querían tirar, de ahí su nerviosismo.
Alejandro Román aseguró que, tras la demolición, él seguirá "viviendo ahí" puesto que no dispone de "otro sitio". Este vecino de la Cañada Real señalaba el solar derribado, mientras impotente explicaba que antes él "vivía ahí". Además, Román se quejó de que desde el Ayuntamiento madrileño no le dan "ninguna solución ni explicación", y denunció que las administraciones locales y regionales "han empezado a meter mano" en esta zona.
Alejandro explicó además que compró los terrenos hace quince años por 2.300.000 pesetas, y que este es su trabajo, su casa y sus únicas posesiones. Detalló además que hace seis años vendió el terreno donde se levantaba el inmueble retirado, pero no llegaron a pagarle.
Lidia Resani, presidenta de la Asociación de Vecinos del Sector 4 denunció también que no se ofrecieran "alternativas" a los vecinos afectados. En ese sentido subrayó la ausencia del Samur Social en el derribo.
"Siempre se digna el Ayuntamiento de Madrid que viene el Samur Social y yo os invito a que lo busquéis a ver dónde está. Lo único que encontramos son tres millones de efectivos de la Policía Municipal de Madrid asediando a todos los vecinos", protestó la representante vecinal, quien explicó la ausencia de este dispositivo a que "al ser vecinos de la Cañada" el Samur les tiene "poco aprecio".
Por su parte, el Ayuntamiento dijo que sí hubo Samur Social.
* Qué - 24.03.10
Foto: Madrid, la Cañada Real - madridiario.es
Enésimo 'asalto' a la Cañada
en
24.3.10
por UrbanismoPatasArriba
Unknown
Tema: NOTICIAS Madrid
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
0 comentarios :
Publicar un comentario