El principal argumento del tribunal consiste en que el proyecto urbanístico que pretende acometer el arzobispado "constituye una verdadera remodelación urbana y eso solo puede tener cobertura con un plan protector y el que ha sido aprobado no tiene esa naturaleza. Por lo que conduce a su anulación". La cuestión es que la zona está incluida en el recinto de la villa de Madrid y sus elementos, el seminario conciliar, el templo de san Francisco el Grande, la basílica de San Francisco y la zona histórica, están catalogados como Bien de Interés Cultural (BIC), figura que cuenta con la máxima protección patrimonial. Por eso, no se pueden tener, exclusivamente, criterios urbanísticos. El tribunal echa en falta un plan de protección. Considera que el plan aprobado por el Ayuntamiento de Madrid "puede comportar la modificación de la estructura urbana". Además, la sentencia explica cómo el proyecto del arzobispado de construir un mini-Vaticano alteraría la alineación histórica y la silueta paisajistica (skyline).
El año pasado el TSJM ya dictó sentencia, a raíz de una denuncia vecinal, contra el plan del arzobispado para construir la Casa de la Iglesia, un edificio de cuatro plantas, una residencia para sacerdotes de tres plantes y una biblioteca diocesana con una superficie de 6.000 metros cuadrados en la zona donde Goya inmortalizó en La pradera de San Isidro, en la zona conocida como Las Vistillas. "Hay que recordar que ya ha habido una primera sentencia favorable a los vecinos que protestaron contra el proyecto del arzobispado. Ahora esta sentencia confirma la anulación", sostiene el portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid, quien precisa: "Lo que hace el tribunal es invalidar el plan parcial que desarrolla el proyecto. Es una victoria de todo el movimiento vecinal que han estado junto a nosotros", apunta Lucas. Las razones del tribunal para dar la razón a los vecinos en la anterior son similares a las que ha esgrimido ahora. El Ayuntamiento no respetó las normas de patrimonio.
El origen del problema está en el convenio que el Ayuntamiento, gobernado por Alberto Ruiz-Gallardón, firmó con el Arzobispado de Madrid. Según este acuerdo, la iglesia cedería terrenos al Ayuntamiento donde podría construir un polideportivo y una escuela infantil, así como otros dos centros sociales: un centro para mayores y otro para personas sin hogar. A cambio el Gobierno municipal permitiría al arzobispado levantar varios inmuebles junto a la basílica de San Francisco el Grande. Con el convenio la ciudad perderá 15.000 metros cuadrados de zonas verdes. Una zona de la cornisa del Manzanares donde crecen más de 500 chopos, abetos y una verde pradera. "El PP no puede seguir haciendo caso omiso a las reiteradas sentencias judiciales en contra del proyecto", proclama David Lucas. Y añade: "Alberto Ruiz-Gallardón no puede hacer oídos sordos a la sentencia", reclamó el portavoz socialista. El portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid reclama al regidor del PP: "Que haga caso a lo que dicen los tribunales y reclaman los vecinos. Que paralice cualquier actuación en el mini-Vaticano y rectifique toda la actuación".
Los vecinos del entorno han batallado duramente para paralizar el proyecto. "Allí están los restos más antiguos más importantes de la cerca de Madrid, y restos del jardín del palacio de Osuna, que pertenecía anteriormente al duque del Infantado. Hay una gran riqueza arqueológica", sostiene Vicente Patón, presidente de Madrid, Ciudadanía y Patrimonio. "Los vecinos estamos muy contentos. Entendemos que la Iglesia tiene unos derechos. No queremos perjudicar a nadie. El Ayuntamiento tiene instrumentos para compensar el arzobispado. Solo queremos que se salve el entorno", sostiene Vicente Patón.
Cronología
- Noviembre de 1997. El Ayuntamiento de Madrid y el arzobispado firman un convenio para intercambiar solares en la ciudad. El Consistorio cedía 42 solares en zonas de la periferia, por otros 11 que la iglesia entrega por otras zonas de la ciudad. Entre ellas, terrenos en la cornisa del Manzanares.
- Marzo de 1999. El arzobispado y el alcalde Álvarez del Manzano firman el convenio para construir la sede de la curia junto a San Francisco el Grande.
- Octubre de 2007. La Comunidad de Madrid aprueba el Plan de Ordenación Urbana que permite la edificación en los terrenos del Arzobispado en La Cornisa.
- Mayo de 2009. La Comisión Europea abre un expediente al plan de reforma. Los vecinos habían presentado más de 22.000 firmas en contra.
- Junio 2010. Una primera sentencia del TSJM anula el proyecto de construir un mini-Vaticano en Las Vistillas
* El País - 2.03.11
Foto: Manifestación de vecinos contra el plan del arzobispado de construir un mini-Vaticano en Las Vistillas.- elpais
5 comentarios :
Es absolutamente vergonzoso que la Iglesia se encuentre en estos momentos derribando un muro del siglo XVII en el parque de la Cornisa. Cualquiera puede pasear por allí, como hago yo todos los días, y comprobar el estado actual del propio muro. Se ven pintadas contra Rouco, haciéndole responsable de esa caída lamentable. Es una zona verde que deben cuidar y no dejar abandonada y puedo asegurar como vecino que ese espacio, en manos de la Iglesia, hará que la zona se degrade. En cualquier caso, a propia Iglesia y los planes urbanos han hecho que, por ejemplo, el pasaje del Panecillo, próximo a la calle Sacramento, haya quedado vedado al paseante. La iglesia lo cerró por un lado y una casa por otro, impidiendo el paso por medio de un aparcamiento privado. Es vergonzoso, lo reitero, que se produzcan estos hechos de una manera unidireccional. La calle no es de ellos, los parque tampoco. No hay más que comprobar cómo han convertido los aledaños del Palacio Real, al lado de la Almudena, en una suerte de hospital blanco, horrible que ha transformado para mal toda la vista desde la Cuesta de la Vega. Por no hablar de la construcción del edificio de casas que hay en el Viaducto, erigido sobre los pilares de la muralla de Madrid y que cualquiera puede ver bajo el puente. Menos mal que la justicia, en este caso, no se ha equivocado.
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Lo celebramos con alborozo. Celebramos que se ponga veto a la pprepotencia, al engreimiento y sobretodo a la ausencia total de ética de que la iglesia y seguidores abusan habitualmente. Queremos centros de enseñanza, hospitales, centros de atención a dependientes ya mayores, ya jóvenes, parques infantiles, zonas verdes. Reclamamos políticas sociales y ¡fuera! tanto oportunista invadiendo nuestros espacios. Ya les sobra un MACROVATICANO con sus vergonzosas corruptelas y su opulencia en desintonía total con sus sermones.
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¡Gran noticia! Al menos esta sentencia conseguirá preservar las áreas verdes, de momento. Aunque para conseguir esta victoria judicial, los vecinos han tenido que sufrir el abandono y la desidia del Ayuntamiento que ha convertido a la Cornisa en un muladar. No quedan espacios limpios de grafiti y tropas de indigentes acampan en la zona. Y esto por no hablar del mamotreto horroroso que se levanta bajo la Almudena, con la venia de Gallardón y con el pretexto de albergar las colecciones reales. Si Goya levantara la cabeza en vez de pintar los desastres de la guerra, pintaría los desastres de la Cornisa.
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Vaya panda de sinvergüenzas especuladores con sotana, que sólo buscan el enriquecimiento propio en nombre de la fe... Yo les ponía un chándal y los mandaba de misiones, a ayudar al prójimo que es lo que dice la religión... Aunque lamentablemente ya no hay que irse muy lejos para encontrar familias necesitadas. De verdad, todavía no entiendo como puede seguir existiendo ésto, vaticanos, pederastas, bancos, oro... con las penurias que está pasando la sociedad española... No tienen vergüenza.
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Es verdad que si este proyecto urbanístico se aprobó se debe al enorme poder que tiene la Iglesia. Es impensable que cualquier otra empresa o confesión religiosa hubiera llegado hasta tan lejos agrediendo moralmente a los vecinos como lo están haciendo .tanto el arzobispado como el Ayuntamiento. Rouco, no todo vale en esta vida tan llena de vida en la que un precioso parque, que es el lugar de encuentro vecinal en medio del ritmo estrepidante de la gran ciudad, es capaz de unirnos a los vecinos, incluidos algunos creyentes que opinan que ustedes lo están haciendo francamente mal.
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