Gijón.- Los vecinos de La Arena y Somió rechazan la torre de la Ería del Piles

ELCOMERCIO* : Su diseño podrá gustar más o menos, pero lo cierto es que la torre proyectada para el complejo de ocio de la Ería del Piles está llamada a generar mucha polémica. Los primeros en rechazarla de plano son los vecinos de La Arena y Somió, y critican no sólo la permisibilidad del Ayuntamiento, sino el respaldo que ha dado la alcaldesa, Paz Fernández Felgueroso, al proyecto. Julia Rodríguez es la presidenta de la Asociación de Vecinos de La Arena, cree que esta estructura de 40 metros de altura «no parece lo más oportuno. Se trata de una iniciativa privada y obedece a unos intereses económicos, pero esperamos que el Ayuntamiento vele por el diseño de ciudad y no por esos intereses. Es el sentir general de los vecinos de La Arena».

Aduce, además, que la Ería del Piles «es una zona de baja edificabilidad» y apoya el complejo de ocio y comercio que se prevé construir, ya que repercutirá en el beneficio del barrio, pero no así la torre, aunque Julia Rodríguez recuerda que «cualquier momento es bueno para cambiar de opinión y defender lo que se cree que es mejor». En su opinión, en esa zona «no se necesita liberar espacio. Es la era de las torres y a los dirigentes se les llena la boca con liberar terreno y una arquitectura de vanguardia, pero no es preciso en la Ería del Piles».
De la misma opinión es Soledad Lafuente, presidenta de la Asociación de Vecinos San Julián, de Somió, quien asegura que «estamos en desacuerdo con que se construya en altura, ya que la zona está catalogada como suelo urbano de baja densidad. Creo que la torre tiene unas dimensiones extremas».
Los vecinos ven «ilógica» la construcción de la torre, al igual que lo están con otras edificaciones en altura previstas para la zona rural, como puede ser en Cabueñes, Deva o Granda. Soledad Lafuente apunta otro problema con el que se encuentran los vecinos de la parroquia y es que «a Somió le hacen la 'pinza' urbanística, desde la zona de La Guía hasta las inmediaciones de Casa Suncia. Está bien que acerquen los servicios a los ciudadanos, pero no se está respetando el entorno».
Los profesionales del urbanismo y la arquitectura tienen opiniones encontradas sobre este proyecto, aunque la solución arquitectónica de la torre no parece mal. El más crítico con ella es Ángel Terán. Este arquitecto considera «correcto» el proyecto de la zona de ocio, así como «retrasar varios metros la línea de los edificios, para tener más amplitud en una zona donde da mucho el sol».
Respecto de la torre, la considera «no adecuada, porque detrás está La Providencia y tapará toda la colina desde la línea de visión del Muro. Con la torre, desaparecerá el 30% de La Providencia, por eso no la acabo de ver bien en la zona donde está pensada», asegura.
Para el arquitecto Diego Cabezudo, la solución de la torre es buena para ganar espacios y considera que, «en una primera impresión, no molesta». El problema es que este profesional asegura que «no le veo la necesidad. Dependiendo de la edificabilidad que se tenga, no está mal hacer una torre para dejar el resto del espacio del terreno libre. La pregunta es ¿se ha dado demasiada edificabilidad a esa zona? Creo que el problema parte de ahí, ya que la Ería del Piles no requiere tanta. Pero una vez que la tienes, no está mal aprovecharla en una torre».
Eso sí, Cabezudo considera que la bahía de Gijón «no necesita ningún contrapunto a la iglesia de San Pedro ni un hito para el eje de la avenida de Castilla». Pero este arquitecto prefiere ser cauto ante el proyecto elaborado por sus colegas Antonio Fernández Morán y Luis Alberto Mingo Macías. Es el mismo equipo que ideó el hotel Abba y que Cabezudo criticó en su momento: «Una vez construido, no me pareció una mala solución, porque se camufla mucho. Metí la pata y rectifiqué, ya que el impacto es el menor posible. En el caso de la torre de la Ería del Piles sí tiene sentido construirla de cristal, ya que el sol le da desde varios ángulos. Donde no tiene sentido es en el Muro, ya que los edificios dan al Norte».
Jovino Martínez Sierra es de la misma opinión: «Lo mejor resuelto es la torre. Es una solución buena para liberar espacios». Pero este arquitecto y urbanista también apunta el problema de base, que no es otro que «el debate de la construcción en altura surge por la densidad de la edificación. Una vez que tienes esa edificabilidad, lo importante es que la arquitectura sea de calidad y el proyecto propuesto la tiene».
La polémica torre tendrá 13 plantas y 40 metros de altura. Será un apartahotel acristalado de color verde (Abba Mar). El conjunto del centro comercial y de ocio de la Ería del Piles tardará entre 24 y 30 meses en construirse, siempre después de que sean ocupados los 38.556 metros cuadrados de terreno que componen esta actuación urbanística.





* El Comercio Digital - 19.08.10
Foto: Proyecto del complejo de ocio diseñado para su construcción en la Ería del Piles.- el comercio digital