
Poco después de las 13.30 horas, los policías han comunicado a los políticos que se encontraban junto al número 15 de la calle de Vidal de Canelles que iban a empezar a desalojar el inmueble para "materializar la licencia de derribo" de esta casa, una de las cinco que el Ayuntamiento pretende derruir a partir de hoy y que la pala excavadora ha comenzado finalmente a derribar a las 14.37 horas.
Entre los políticos desalojados a la fuerza se encuentran el máximo responsable del PSPV en la ciudad de Valencia, Salvador Broseta, a quien han arrastrado de los brazos fuera del cordón policial, en cuyo interior aún permanecen los periodistas.
Asimismo, los policías han desalojado a la diputada autonómica y portavoz adjunta de Compromís Mònica Oltra, a la coordinadora de Esquerra Unida Marga Sanz y al concejal socialista Vicente González Móstoles, mientras desde una finca colindante varios vecinos han arrojado a los agentes un cubo de agua, todo ello entre los constantes gritos de protesta de las docenas de vecinos que siguen todo este dispositivo en las inmediaciones de la zona afectada.
El dispositivo policial, formado por una treintena de agentes de la Policía Local y una quincena de policías nacionales, ha aguantado un sinfín de insultos por parte de los vecinos, contra algunos de los cuales ha cargado el Cuerpo Nacional de Policía cuando intentaban sortear el cordón de seguridad.
Además, desde numerosos balcones de la calle afectada se han realizado caceroladas, mientras se repiten los llantos, los gritos y las muestras de indignación; representantes de la plataforma Salvem el Cabanyal siguen atentos el avance de la pala excavadora desde primera línea del cordón policial.
La pala ha comenzado a derribar esta casa después de que cuatro policías nacionales, dos de ellos abordo de un coche de bomberos, hayan desalojado del tejado a dos chicos que se habían atrincherado para intentar retrasar el derribo; desde lo alto, y antes de ser reducidos, han arrojado flores amarillas a los policías mientras aseguraban a gritos que son vecinos del Cabanyal "de toda la vida".
Todo este proceso ha sido profusamente grabado y fotografiado por los medios de comunicación presentes aún en el interior del cordón policial, así como por docenas de teléfonos móviles y cámaras digitales de los vecinos que no han parado de corear lemas en contra del Plan municipal de Protección y Reforma Interior (PEPRI) del Cabanyal.
Se inician los derribos
Varias palas excavadoras comenzaron a primera hora de hoy a derribar un grupo de viviendas de la calle de San Pedro del barrio del Cabanyal, donde se concentró desde un principio un grupo de vecinos para tratar de impedir la actuación.
Según ha informado a EFE la portavoz de la plataforma vecinal "Salvem el Cabanyal", Maribel Domenech, desde las 08.00 horas varios vecinos del barrio han acudido al lugar, en el número 29 de la citada vía, previendo que hoy iban a comenzar los derribos ya que entra en vigor la ley aprobada el pasado 24 de marzo en el pleno de Les Corts, por la mayoría de votos del PP, que autoriza todas las actuaciones del Plan del barrio del Cabanyal de Valencia.
Las palas han derribado ya el inmueble recayente en la calle de San Pedro y en la de Luis Despuig. El concejal socialista Vicente González Móstoles ha acudido a la zona a interesarse por estos hechos. Allí también se ha desplazado el teniente de alcalde Alfons Grau.
Según Domenech, los vecinos han rodeado las casas que se tenía previsto derribar cuando han llegado "alrededor de 30 o 40 policías en varios furgones" y les han retirado del lugar "por la fuerza". La portavoz señaló que comunicaron a los trabajadores que han presentado una cautelarísima en los tribunales y les pidieron que paralizaran los derribos hasta que éstos se pronunciaran al respecto. No obstante, lamentó que en el barrio "se sigue con la ejecución".
En la actuación intervienen "numerosas" palas excavadoras y coches-grúa, y Doménech ha afirmado que, por los medios desplegados en la calle, los vecinos temen que los derribos de hoy vayan a ser "en cadena". Según ha declarado, "se está viviendo un ataque masivo" en el barrio, "cuyo objetivo esta jornada es la calle San Pedro".
No obstante, ha insistido en que los vecinos concentrados en la vía, que protagonizan constantes pitadas, quejas y sentadas de protesta, no van a abandonar la zona a pesar de la presión policial. "No nos hemos movilizado antes de que entrara en vigor, en enero, la orden ministerial que protegía el barrio. Posteriormente a ella, sí lo estamos haciendo porque esto es un atropello", se ha quejado.
Ha criticado además el "excesivo" despliegue policial -del Cuerpo Nacional de Policía y de la Policía Local- desarrollado con motivo de los derribos, "unos policías que nunca antes han venido a una zona que se considera peligrosa por la venta de drogas", ha criticado.
* Levante-EMV - Agencias - 6.04.10
Foto: levante-emv.com